Las críticas y el reproche público no se hicieron esperar y en cuestión de horas, los blogs de música y los noticieros reprobaban de manera reacia a Anselmo, calificándolo de racista, supremacista y discriminatorio.
Las voces de los fanáticos en medios como Facebook, Twitter y las secciones de comentarios de los blogs que publicaron la nota mostraban diversas reacciones condenatorias hacia el ex-Pantera; desde los que demandaban una disculpa pública por parte del cantante hasta aquellos que demandaban que Anselmo fuese encarcelado. O asesinado.
E incluso colegas de otras bandas no perdieron la oportunidad de desaprobar la conducta de Phil Anselmo; miembros de Anthrax, Tesseract, Every Time I die, All Shall Perish y Darkest Hour se pronunciaron en diferentes medios sociales en contra del comportamiento supuestamente racista del cantante.
Quizás la voz más autoritaria fué la de Rob Flynn, vocalista y guitarrista de la banda Machine Head, quien publicó un video en el que expresaba su malestar con Phil Anselmo y lo urgía a disculparse públicamente.
El punto de ebullición llegó hasta el momento en el que varios festivales de Metal europeos en donde se presentaría Down (actual banda de Anselmo) decidieron cancelar su presentación.
Consecuentemente, el ex-vocalista de Pantera cedió a la presión social (increíblemente, dado el perfil de éste singular personaje) y publicó una serie de disculpas y justificaciones a sus fans, tanto en video como por medio escrito.
Phil Anselmo puso en riesgo a la música Heavy Metal; pero no por la manera en la que actualmente se maneja en los medios de entretenimiento; el cantante lo hizo al pedir disculpa por sus acciones.
Más aún, Phil Anselmo nunca debió haberse disculpado, por más "grave" que sus detractores opinen que fueron sus referencias a la ideología supremacista.
Debo aclarar que si bien, la música heavy es una de mis principales inspiraciones y géneros favoritos de la música, Pantera no es de mis grupos predilectos. E incluso me atrevo a decir que de alguna manera, personalmente Phil Anselmo me desagrada (y no precisamente por supremacista, lo cual, me tiene sin cuidado).
Dicha aclaración deberá ser suficiente para evidenciar que mis argumentos no están a la defensa del cantante, ni de sus posturas e ideologías ciertamente cuestionables (las cuales, te invito amablemente, querido lector, a que dejemos ese asunto fuera de ésta ecuación). En lugar de eso, mis argumentos están a la defensa de la libre expresión y la denuncia social.
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Cierto es que el Heavy Metal, como fenómeno global de la música y la industria del entretenimiento, es un género que congrega todo tipo de nacionalidades y razas, lo cual hace de éste género una fuerza única en el mundo. Dicho lo anterior, la tolerancia debería ser, idealmente, una virtud de ésta comunidad.
Lamentablemente, dicha virtud estuvo ausente durante éste incidente, puesto que hoy en día estamos viviendo un ambiente intolerante en donde cualquier cosa que ofenda y esté sujeta a la agenda políticamente correcta se castiga con el ostracismo social.
Hoy en día, en los Estados Unidos, negros, judíos, mexicanos, musulmanes y etcéteras de otras razas y creencias se congregan y se asertan libremente en la sociedad americana sin ningún impedimento y hasta con celebración. ¿Por qué, entonces, Phil Anselmo es reprobado al expresar su lealtad racial y todavía tiene qué pedir perdón a la gente que se sintió ofendida?
¿No resulta irónico que hoy en día, en Estados Unidos de América puedes gritar "Allahu Akbar" sin ningún tipo de impedimento, pero no puedes gritar "White Power" sin que te acusen de racista?.
Aún más irónico en éste asunto particular es que si fuese un hecho comprobado que Anselmo es en realidad un supremacista consumado en pro de la exterminación de otras razas que no sean la suya, entonces el cantante ha sabido ejercer más tolerancia hacia sus fans internacionales que sus detractores hacia él.
Lo Verdaderamente Grave del Asunto
Entonces quizás te preguntes, querido lector, ¿Por qué ser de la opinión personal de que el señor Anselmo puso en riesgo al Heavy Metal con su disculpa pública?. ¿En qué se verá afectada la música heavy en los tiempos posteriores?
¿Qué implicaciones tiene la crucifixión de Phil Anselmo para el mundo del metal?
Permíteme explicarte:
En la historia de la música heavy, ya han habido numerosos intentos por parte de ciertos sectores de la sociedad (sectores supuestamente tradicionalistas y conservadores) por censurar los contenidos del género mismo. Un antecedente muy conocido relata y ejemplifica ésto:
Dicho antecedente se llevó a cabo en 1985, cuando el Senado de los Estados Unidos de América sostuvo una audiencia general en favor de las acciones pro-censura musical propuestas por el Parents Music Resource Center (PMRC), organización de carácter supuestamente civil, liderado por Tipper Gore, esposa del ex-vice presidente, Al Gore (quien coincidentalmente, era senador en ese año).
Tipper Gore y otras fundadoras del PMRC, señoras conocidas como las “Washington Wives” (En primera, en clara referencia a la novela de Ira Levin, “The Stepford Wives”, y en segunda, por sus claras conexiones con el gobierno en Washington) justificaban su guerra contra los contenidos que ellas consideraban ofensivos argumentando que ciertos géneros urbanos, en especial el Heavy Metal, "han dado paso a expresiones abiertas y descripciones de actos sexuales violentos, consumo de drogas, y coquetería con el ocultismo."
También argumentaron que “Existen muchas causas para los males de nuestra sociedad, pero está dentro de nuestra contención que los mensajes pervasivos dirigidos a los niños, los cuales promueven y glorifican el suicidio, la violación, el sadomasoquismo y otros más, deben de ser contados dentro de los factores contribuyentes.”
E incluso, Paula Hawkins, una de las fundadoras de la organización, procedió a mostrar durante la audiencia las portadas de Pyromania, de Deff Leppard, W.O.W. de Wendy O. Williams y W.A.S.P. de W.A.S.P.
Cabe señalar que para el momento de la audiencia, el PMRC ya había incrementado sus métodos de censura más allá del uso del sticker popular de "Parental Advisory", teniendo como resultado de ésta presión que la Asociación Americana de la Industria del Disco (RIAA, por sus siglas en inglés) desarrollara un sistema de ratings similares a los de la MPAA en relación a las películas de Hollywood y también que cadenas como Wal-Mart, J.C. Penney y Fred Meyer retiraran de manera masiva revistas de heavy metal y álbumes de rock de sus tiendas.
Entre dichos álbumes retirados (no sólo de tiendas, sino de la radio y la televisión), se encontraban especialmente aquellos que estuvieran marcados en esa infame lista negra (cortesía del PMRC) llamada "The Filthy Fifteen":
Dee Snider declaraba que: "La entera responsabilidad de defender a mis hijos recae en los hombros de mi esposa y yo, debido a que nadie más es capaz de hacer juicios por nosotros”. (También se rumora que Snider declaró en plena audiencia que "Tipper Gore puede venir a besarme el culo".)
Por su parte, Frank Zappa declaraba que: “La propuesta de la PMRC no tiene sentido, la cual falla en proveer beneficios reales a los niños, infringe las libertades civiles de aquellas personas que no son niños, y promete mantener a la corte ocupada por años lidiando con la interpretación y el cumplimiento de problemas inherentes en el diseño de la propuesta.”
Vale la pena ver el video de la audiencia, el cual se encuentra disponible en YouTube; el discurso en donde Dee Snider hizo trizas a Tipper Gore y su comité es oro puro. Puedes ver el video haciendo Click Aquí.
Treinta años después de dicha audiencia, las expresiones musicales extremas se han proliferado y ningún intento por parte de alguna organización u agencia gubernamental ha podido hacer mucho por censurar los contenidos de la música urbana, en especial del Heavy Metal.
Aunque no por eso los intentos se han dejado de hacer; otro caso reciente fué durante el llamado #MetalGate en el 2014, cuando grupos feministas (¿Feminazis?) calificaron los contenidos del Metal como promotores del odio, el racismo y la violencia hacia la mujer, calificando a los fans metalheads de retrógradas misóginos merecedores de exclusión social.
El Control de los Contenidos
Censurar contenidos es una forma de las élites por controlar la cultura y el derecho a la expresión y el libre pensamiento. Las élites son quienes deciden (en teoría, desde luego), qué podemos escuchar y qué no. Aquello que ellos consideran que no podemos escuchar por lo general tiene qué ver con contenidos que alteren el orden establecido y la agenda social.
¿Qué tiene qué ver ésto con la conducta y el comentario de Phil Anselmo? Es sencillo: Gritar "Allahu Akbar" en Estados Unidos está permitido por que ello no interfiere con la agenda de las élites; al contrario, se anima a que las minorías se aserten en la sociedad americana, ya que ello permite que se cumpla con la agenda migratoria.
En cambio, gritar "White Power" no está permitido, simple y sencillamente por que aunque la ideología "supremacista" no incuye necesariamente la denostación de otras razas y/o culturas (proposición sujeta a debate para otro día), ésta frase aserta el nacionalismo y la identidad del grupo mayoritario capaz de posar como una amenaza real a la agenda primaria de las élites, la cual tiene qué ver con proteger su posición.
Ciertamente, la música heavy ha estado bajo el escrutinio de éstos grupos de control desde su incepción, dada la naturaleza "rebelde" del género. El infortunado incidente de Phil Anselmo ofreció la excusa perfecta para preparar futuras acciones en pro de la censura del género del metal.
Por su parte, Philip Hansen Anselmo (nombre real del ex-Pantera) es uno de los íconos más emblemáticos de la música heavy. Su estatus de ídolo le confiere un poder de influencia sobre hordas de fanáticos del Heavy Metal, jóvenes y maduros por igual. La disculpa pública de Anselmo le está señalizando a éstos grupos de control que el género del metal se encuentra actualmente abierto a la regulación de sus contenidos por parte de agencias de gobierno y comités sociales similares al PMRC.
Quizás tú pensarás, querido lector, que si el género ha sobrevivido numerosos intentos de censura a través de los años, éste incidente no debería ser diferente y que todo estará bien. Pero hay una diferencia enorme entre las audiencias metaleras de 1985 con las de hoy día, 2016: a juzgar por la reacción de cólera desmedida tanto de los fanáticos como de músicos de otras bandas, se infiere que la misma audiencia metalera se encuentra dispuesta a ser "regulada", o que al menos no acatarán acciones si dicha "regulación" es llevada a cabo.
En conclusión
Las posturas personales de Phil Anselmo (que, como ya he dicho, no se niega que sean efectivamente controversiales) no deberían ser incumbencia del resto de los aficionados al Heavy Metal si es que dichas posturas no causan afectación a terceros, están en detrimento (directo) de grupos vulnerables, o violen los derechos civiles del público en general.
Para mí personalmente, lo que Anselmo piense no es de mi incumbencia, y ello no debería alterar la manera en la que sus fanáticos gozan de su música. Pero también pienso que su disculpa pública era totalmente innecesaria y sólo pone en riesgo al hecho de que grupos de control gubernamentales decidan actuar de una vez para censurar un género del cual, muchos de nosotros disfrutamos.
En todo caso, el que se debió haber disculpado debió haber sido Rob Flynn por su video en donde éste señor nos ofrece una lectura sobre cómo no debemos de seguir el ejemplo del "malo" de Phil Anselmo, en toda su autoridad moral...
... Y no por estar en desacuerdo con las posturas de Rob Flynn dejaré de escuchar a Machine Head.
Ricardo Siller