Se acabaron las épocas en que estaba de moda la mentalidad de diseño (Design Thinking).
Qué rápido pasa el tiempo, ¿No es así, querido lector?. Todavía en el 2014, todo mundo hablaba sobre las ventajas competitivas de la mentalidad de diseño.
Ciertamente, las herramientas que nos dió éste campo han ayudado a muchos empresarios y emprendedores a crear productos y servicios mejor centrados en el usuario (sus clientes).
No obstante, esas mismas herramientas se quedan cortas a la hora de crear modelos de negocio sostenibles.
Debemos estar conscientes de que una idea de negocio no es todavía un modelo de negocio, y por esa razón, el Diseño de Negocios es el remedio para éste problema.
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Qué rápido pasa el tiempo, ¿No es así, querido lector?. Todavía en el 2014, todo mundo hablaba sobre las ventajas competitivas de la mentalidad de diseño.
Ciertamente, las herramientas que nos dió éste campo han ayudado a muchos empresarios y emprendedores a crear productos y servicios mejor centrados en el usuario (sus clientes).
No obstante, esas mismas herramientas se quedan cortas a la hora de crear modelos de negocio sostenibles.
Debemos estar conscientes de que una idea de negocio no es todavía un modelo de negocio, y por esa razón, el Diseño de Negocios es el remedio para éste problema.
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Éstos son tiempos, querido lector, en donde estamos experimentando una nueva ola de disrupción tecnológica en prácticamente todas las industrias a partir del año 2020.
Ésta turbulencia ha vuelto necesario el contar con herramientas innovadoras que nos ayuden a re-pensar los modelos de negocio tradicionales, los cuales se están viendo acortados en el tiempo en que se mantienen viables.
Precisamente éste estado de las cosas es lo que hace al Diseño de Negocios aún más necesario.
De Dónde Viene el Diseño de Negocios
La realidad es que el concepto de Diseño de Negocios ha estado en boga por algunos años.
Si bien, hoy por hoy, existen algunos programas universitarios dedicados al tema (Por ejemplo, en Finlandia y Berlin, Alemania), por el momento, sigue siendo un área aún en desarrollo y escasamente formalizado.
Aunque recientemente ha habido un despegue del concepto que se ha dado principalmente en los ecosistemas start-ups.
Quizás es por esa razón por la que habrá quien considere que el Diseño de Negocios es un campo exclusivo de unos cuantos sin aplicación alguna para las grandes empresas, pero no es así, puesto que al día de hoy, existen oportunidades tecnológicas que permiten la implementación de modelos de negocios tipo "lean start-up" y también te permiten la iteración de manera mucho más rápida que los ciclos largos de Investigación y Desarrollo tradicional.
La maravilla del Diseño de Negocios es que te provee herramientas y métodos para desarrollar y probar nuevos modelos de negocios, cualquiera que éstos sean, al mismo tiempo que hace la diferencia entre un servicio que pase sólo como truco de marketing a un modelo que es verdaderamente sostenible.
Cómo nos Ayuda el Diseño de Negocios
Pero, ¿Para qué nos sirve el Diseño de Negocios? He aquí algunas respuestas, querido lector:
Se trata de un abordaje sistemático, basado en la articulación de supuestos, pruebas con prototipos, iteración y aprendizaje rápido, usualmente siguiendo éstas fases:
Por Qué Creo Que Es Relevante
Mucho de mi trabajo como consultor tiene qué ver con la colaboración cercana en equipos, usualmente con diseñadores de servicio y desarrolladores de software para integrar profundamente un modelo de negocio con la propuesta de valor en un producto.
Lo anterior, me ha hecho volverme cercano al concepto, lo que me ha permitido darme cuenta que el Diseño de Negocios tiene el potencial de proveerles a los emprendedores y managers una manera de pensar creativamente sobre su modelo de negocio y su desarrollo a futuro.
Además, el abordaje sistémico que mencioné anteriormente permite probar la viabilidad de nuevas ideas con pocos recursos, lo cual, para muchos les resulta atractivo.
Estoy convencido que en el futuro, ésta será la competencia clave que decidirá el éxito en un mercado acelerado.
Lo bonito de todo es que el Diseño de Negocios es aún un campo en desarrollo.
Ricardo Siller Cárdenas
Ésta turbulencia ha vuelto necesario el contar con herramientas innovadoras que nos ayuden a re-pensar los modelos de negocio tradicionales, los cuales se están viendo acortados en el tiempo en que se mantienen viables.
Precisamente éste estado de las cosas es lo que hace al Diseño de Negocios aún más necesario.
De Dónde Viene el Diseño de Negocios
La realidad es que el concepto de Diseño de Negocios ha estado en boga por algunos años.
Si bien, hoy por hoy, existen algunos programas universitarios dedicados al tema (Por ejemplo, en Finlandia y Berlin, Alemania), por el momento, sigue siendo un área aún en desarrollo y escasamente formalizado.
Aunque recientemente ha habido un despegue del concepto que se ha dado principalmente en los ecosistemas start-ups.
Quizás es por esa razón por la que habrá quien considere que el Diseño de Negocios es un campo exclusivo de unos cuantos sin aplicación alguna para las grandes empresas, pero no es así, puesto que al día de hoy, existen oportunidades tecnológicas que permiten la implementación de modelos de negocios tipo "lean start-up" y también te permiten la iteración de manera mucho más rápida que los ciclos largos de Investigación y Desarrollo tradicional.
La maravilla del Diseño de Negocios es que te provee herramientas y métodos para desarrollar y probar nuevos modelos de negocios, cualquiera que éstos sean, al mismo tiempo que hace la diferencia entre un servicio que pase sólo como truco de marketing a un modelo que es verdaderamente sostenible.
Cómo nos Ayuda el Diseño de Negocios
Pero, ¿Para qué nos sirve el Diseño de Negocios? He aquí algunas respuestas, querido lector:
- Para aplicar métodos y procesos del campo del diseño al desarrollo de modelos de negocio innovadores.
- Para crear y capturar valor.
- Para transformar una propuesta de valor en un verdadero negocio.
- Para re-pensar relaciones.
Se trata de un abordaje sistemático, basado en la articulación de supuestos, pruebas con prototipos, iteración y aprendizaje rápido, usualmente siguiendo éstas fases:
- ENTENDIMIENTO: Comenzamos por un entendimiento; del mercado, de sus jugadores, de las diferentes fuerzas que afectan una organización, etc.
- DISEÑO: Trasladamos las mejores prácticas de una industria a otra y articulamos supuestos.
- DESARROLLO: creamos un prototipo de modelo de negocio, lo evaluamos e identificamos los supuestos más críticos y relevantes, según el impacto o influencia.
- EJECUCIÓN: Probamos el modelo, aprendemos e iteramos.
Por Qué Creo Que Es Relevante
Mucho de mi trabajo como consultor tiene qué ver con la colaboración cercana en equipos, usualmente con diseñadores de servicio y desarrolladores de software para integrar profundamente un modelo de negocio con la propuesta de valor en un producto.
Lo anterior, me ha hecho volverme cercano al concepto, lo que me ha permitido darme cuenta que el Diseño de Negocios tiene el potencial de proveerles a los emprendedores y managers una manera de pensar creativamente sobre su modelo de negocio y su desarrollo a futuro.
Además, el abordaje sistémico que mencioné anteriormente permite probar la viabilidad de nuevas ideas con pocos recursos, lo cual, para muchos les resulta atractivo.
Estoy convencido que en el futuro, ésta será la competencia clave que decidirá el éxito en un mercado acelerado.
Lo bonito de todo es que el Diseño de Negocios es aún un campo en desarrollo.
Ricardo Siller Cárdenas
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